¿Alguna vez has intentado congelar el movimiento en tu fotografía? ¿O probaste la fotografía de salpicaduras de agua? Si no, este es el artículo para ti.
Si es así, este sigue siendo el artículo para usted, ya que le mostraremos cómo divertirse fotografiando salpicaduras de agua.
¡Vamos a crear una toma con bebidas frías, salpicaduras dinámicas y un ambiente divertido para la fotografía creativa de alimentos!
Lo que más me gusta del equipo fotográfico es que la mejor cámara es la que tienes contigo . Lo mismo ocurre con la iluminación y cualquier otro equipo.
No voy a decirte que necesitas un arsenal de equipos sofisticados o lentes de cámara costosos para fotografiar gotas de agua. Claro, siempre es mejor tener luces estroboscópicas de vanguardia. O maquinaria especial que te da control sobre cada detalle de tu escena.
O incluso robots que puedan proporcionar control sobre el flujo de la salpicadura, su velocidad, la forma que toma, la cantidad de líquido vertido y otros parámetros.
Todas estas cosas hacen la vida más fácil, pero eso no significa que no puedas crear hermosas fotografías de salpicaduras de agua sin ellas.
Entonces, vamos a disparar salpicaduras de agua usando una cámara, dos flashes y una pistola de pegamento. Eso es todo lo que necesitas.
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1. Cómo congelar el movimiento
En primer lugar, necesitamos una fuente de luz. Eso es lo más importante. Debe ser adecuado para fotografiar escenas de alta velocidad, como fotografiar gotas de agua. Puede usar luces estroboscópicas o flashes de zapata (luces rápidas).
En mi caso, la escena está iluminada con dos flashes SB-910. Estas son soluciones asequibles y fáciles de usar para problemas de movimiento congelado.
Sin embargo, puede usar cualquier cosa que tenga una duración de flash lo suficientemente corta. Esta es una característica de cualquier flash o luz estroboscópica. Se refiere a la cantidad de tiempo que un flash emite luz para una sola ráfaga.
Dado que está disparando en un entorno oscuro (¡y debería hacerlo!), la duración del flash se convertirá en su velocidad de obturación.
La luz golpeará el sensor de su cámara solo durante el tiempo que el flash esté funcionando, iluminando la escena.
No importará si su velocidad de obturación está configurada para 1/250 de segundo o para medio minuto.
Si no hay luz ambiental disponible, el flash es la única fuente de luz visible. De esta forma, el sensor de la cámara solo queda expuesto a la luz durante la duración del flash.
Para evitar gotas borrosas, tome una foto con los flashes apagados. Esta toma debe verse como un rectángulo negro. Eso significa que no hay exceso de luz.
En mi experiencia, la duración del flash lo suficientemente corta para las salpicaduras de agua es de aproximadamente 1/4000 de segundo. Pero obviamente, cuanto más rápido, mejor.
Esta es la velocidad que ayuda a congelar el líquido en movimiento y mantiene todas las gotas nítidas y claras. Elija un flash Speedlight o una luz estroboscópica lo suficientemente rápida.
Además, consulte su manual y descubra si la velocidad de impulso de su fuente de luz es al menos superior a 1/4000 s.
Es posible que deba reducir un poco la potencia de su flash para alcanzar la velocidad de impulso requerida.
Tengo que ajustar la potencia de mis flashes a aproximadamente 1/8 o incluso 1/128.
2. Elija sus accesorios de fotografía Splash
Además del flash apto para disparar a alta velocidad necesitaremos:
- Cámara y trípode;
- Una lente con una distancia focal larga;
- Un transmisor o cable de sincronización para su linterna (opcional);
- Bodegones (rodajas de lima, hojas de menta, un par de cubitos de hielo acrílico y tal vez un martini u otra copa de cóctel);
- Fondo horizontal (algo estrecho y liviano);
- Un fondo vibrante (preferiblemente uno lavable e impermeable);
- Una pistola de pegamento.
Una nota sobre los fondos: necesitamos dos. Uno para colocar las limas y otro para crear un fondo de colores vivos.
Para el primero, es mejor elegir algo estrecho que puedas quitar fácilmente. Usé dos tablas de madera angostas para interconectar el piso.
También funcionan muy bien como fondos de fotografía de alimentos en general. Vale la pena mantenerla incluso si no estás fotografiando algo inusual y dinámico.
Elige una superficie que puedas voltear sin mucho esfuerzo. Así que no elija fondos de granito o mármol.
Y debe estar hecho de un material que pueda sobrevivir a una pistola de pegamento: los fondos acrílicos y plásticos están definitivamente fuera de discusión.
Los tableros de madera de cualquier tipo y las láminas estrechas de madera contrachapada serán aquí tus mejores amigos.
Para un fondo vertical, puede usar cualquier cosa con colores vibrantes. Es bueno si este material es resistente al agua.
Sin embargo, quería que fuera de un color azul brillante, y lo único azul que tenía era una gran hoja de papel de colores.
Así que lo puse lo más lejos posible de la acción y traté de mantener las salpicaduras de agua lejos de él.
3. Mantenga su equipo seguro
Recuerda cuidar la seguridad de tu cámara, iluminación y otros equipos. Mantenga todos los equipos eléctricos fuera del alcance de las gotas de agua. Elija una lente focal larga para colocar su cámara lo más lejos posible de la acción.
Prepara un par de toallas y una pila de servilletas de papel. Tenga cuidado con la dirección y la velocidad de las gotas de agua.
Tenga cuidado con el agua en la lente de la cámara también. Mantenga un filtro UV para protegerlo o tenga a mano un paño de microfibra para limpiar la lente. Las gotas de agua en el medio de la lente de su cámara pueden crear marcas no deseadas en su fotografía.
Descubrí que solo hay dos cosas que puedo hacer con el desorden. El primero es tomar medidas para evitar el desorden. Cubre el suelo con una película de plástico. Coloque un recipiente directamente debajo de la escena para recoger la mayor parte del agua.
La segunda es aceptar el hecho de que se va a salir de control. Su lugar de trabajo se va a poner desordenado. El suelo se va a mojar.
Mantenga todo lo que pueda dañarse con el agua (no solo equipo, sino también papeles y libros, por ejemplo) lejos de la instalación. Limpiarás todo más tarde, ¡así que disfruta el proceso!
4. Crea la Composición
Coloca tus limas y cubitos de hielo acrílico en una bonita composición. Mantenlo simple y recuerda dejar algo de espacio para las gotas que caen.
Me gustan las imágenes que tienen un lugar para respirar, así que dejé mucho espacio vacío para las salpicaduras.
Puede agregar otras frutas con superficies lisas. Las manzanas y las naranjas son buenas, pero los melocotones y los kiwis pueden ser complicados. ¡O agrega una copa de cóctel con una pajita para crear la mezcla perfecta!
Asegúrate de que sea una composición que te guste porque luego no tendrás la oportunidad de cambiarla.
5. Pegue su composición en su lugar
¿Te gusta tu composición? ¿Sí? Ahora es el momento de arreglarlo en su lugar.
Pega cada elemento de tu naturaleza muerta a un fondo. La pistola de pegamento funciona muy bien para superficies lisas como el vidrio, pero revisa todo dos veces. Mejor prevenir que lamentar.
Y sí, pega también las hojas de menta. Tenga cuidado de poner pegamento en los tallos, no en las hojas.
La pistola de pegamento caliente es un nombre muy preciso y puede dejar manchas oscuras en las hojas tiernas.
La pistola de pegamento puede ser una herramienta bastante caprichosa, así que ten cuidado con ella. Trate de no dejar demasiados puntos de pegamento visibles.
No solo pueden exponer su truco de fotografía, sino que también se ven bastante desordenados.
Está bien dejar parte del pegamento visible en, por ejemplo, cubitos de hielo acrílicos. Después de salpicar, el pegamento transparente se verá casi como agua.
6. Ponlo al revés
Ahora elige todo el fondo con la naturaleza muerta pegada y dale la vuelta. Al postprocesar la imagen, la voltearás 180 grados nuevamente.
Cuando coloque su cámara en un trípode, tenga en cuenta esta futura rotación.
Es muy importante asegurarse de que su construcción sea estable y quieta. Tenga especial cuidado con los artículos de vidrio, no ahorre pegamento en ellos y verifique dos veces si se mantienen firmes.
Pon el telón de fondo con tu composición en cualquier soporte improvisado que encuentres. Usé dos marcos de madera. Son ligeros pero bastante estables.
Elija cualquier cosa que sea resistente al agua y que pueda permanecer inmóvil bajo el peso de su telón de fondo con los elementos pegados.
7. Enciéndelo
Es hora de configurar las luces. Uno de mis flashes está dentro de una caja de tiras en el lado derecho de la escena. Está iluminando el fondo azul brillante, que refleja parte de esa luz hacia las limas y el agua. Esta es la luz clave.
Otro flash está detrás de un gran difusor en el lado izquierdo. Esta es la luz de relleno. Levanta las sombras y añade algo de volumen.
Puede usar prácticamente cualquier esquema de iluminación que desee, pero le recomiendo tener al menos algo de luz proveniente de la parte posterior.
¡Hará que los cubitos de hielo sean transparentes y agregará un poco de brillo a las gotas de agua!
Baje la potencia de su flash a 1/16 o incluso 1/128. Esto proporciona un pulso muy corto que congelará el movimiento del líquido y obtendrá una impresionante foto de salpicadura.
8. Elija la configuración de su cámara
Configure su cámara en modo ráfaga (alto continuo) para tomar algunas fotos seguidas y use el enfoque manual.
A veces, el enfoque automático de la cámara no funciona bien, especialmente en modo continuo. Ralentiza las cosas y tiende a cometer errores.
Cambie su enfoque al modo manual y coloque la cámara en un trípode estable para obtener una imagen agradable y nítida.
Finalmente, ajuste la velocidad de obturación de su cámara a la velocidad de sincronización del flash, generalmente entre 1/160 y 1/250 segundos.
A partir de ahí, tome una foto de prueba para establecer qué apertura máxima puede obtener sin subexponer una imagen. De esta manera, puede obtener la profundidad de campo ideal que funcione para su toma.
Eso es todo sobre la configuración de la cámara, ¡estás listo para disparar!
9. Déjalo verter
Asegúrate de que te guste la composición y la iluminación. Toma un tiro limpio. Lo necesitará más tarde en caso de que algo salga mal.
Toma un respiro. Prepararse. Vierta un poco de agua sobre las limas y las hojas de menta, ¡cree un chapoteo! Toma una secuencia de tomas. ¡Un chapuzón más!
Enjuague y repita.
Dado que su trípode le permite mantener la cámara estable, puede hacer tantos intentos como desee.
Experimenta con los tazones que usas para verter agua. Los vasos cilíndricos alargados proporcionan salpicaduras alargadas con gotas en los bordes. Los viales hacen salpicaduras suaves.
Además, intente verter agua desde detrás de las limas. De esta manera, se arqueará detrás de ellos y no caerá al primer plano, lo que dificultará ver los frutos.
Lo más importante, ¡diviértete! No tenga miedo de ensuciar, simplemente mantenga el líquido alejado de cualquier equipo electrónico y especialmente de su cámara.
10. Consejos de posprocesamiento
Ahora es el momento de elegir la mejor salpicadura y modificarla un poco. Obtenga su toma limpia, coloque las tomas con salpicaduras que más le gusten como capas separadas encima y use Máscara de capa para ocultar las partes que deberían estar ocultas.
Esto debería ser bastante simple: coloque capas una encima de otra como un sándwich. Luego crea una máscara de capa en la primera, usa un pincel suave para pintar en las áreas que deben estar ocultas.
Tomé una foto con la salpicadura formando un hermoso arco sobre las limas. Lo combiné con otra salpicadura, que volaba por encima de ellos sin tocar nada.
Además, agregué un par de gotas voladoras para que la dinámica sea más prominente.
Finalmente, ajusta los colores y el contraste.
¡Ahora lo tienes, una bebida refrescante para un caluroso día de verano en una de las fotografías más refrescantes!
Aquí hay algunos otros tiros hechos con el mismo truco.
Deja volar tu imaginación y prueba este truco antigravedad con un conjunto de objetos diferentes.
No te limites a mojito o limonada. Este truco funciona muy bien con café, leche y prácticamente cualquier otro líquido que se te ocurra.
Tampoco tiene que ser fotografía de comida. Prueba matraces de laboratorio con pociones de gravedad cero. Pruebe las flores con rocío que se eleva hacia el cielo.
Piensa en algo que vaya bien con líquido y pruébalo.
Ahora es tu turno. ¡La mejor de las suertes!
La fotografía de salpicaduras de agua es uno de los temas que cubrimos en nuestro curso de fotografía creativa, Fotografía Wow Factor. Si quieres saber más, ¡mira el curso!
A continuación se muestran algunas de las fotografías tomadas por nuestros alumnos. Si quieres saber más, consulta el curso aquí.
